Aunque hay teorías de todo tipo, parece ser que un hablante latino tenía conciencia de un ordo rectus, un orden esperado de las palabras en la frase; este ordo rectus está sujeto a tres reglas principales:
Este ordo rectus puede ser transgredido fundamentalmente por dos tipos de motivos:
Senatus Populusque Romanus Mecum Mos maiorum Dii inmortales
Pueden ser de orden expresivo:
Luget senatus, maeret equester ordo...;
O de orden estético: Spernitur orator bonus, horridus miles amatur. |
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